jueves, 13 de agosto de 2009

LA SOCIEDAD DE LA NIEVE El relato definitivo de una vivencia extrema donde el liderazgo y la capacidad de superación fueron decisivos

Estimad@s amig@s:

“… En la sociedad de la nieve los códigos eran completamente diferentes a la sociedad de los vivos, donde lo que se apreciaba no era algo material, sino intangibles como ser todos iguales, pensar en el grupo, ser fraternos, prodigar afectos o abrigar ilusiones…. Funciono en base a cinco conceptos más sencillos que puedo imaginar: EQUIPO, PERSISTENCIA, AFECTOS, INTELIGENCIA y sobre todo ESPERANZA….”Roberto Canessa

“… Todo el equipo funcionó como un organismo nuevo y muy eficaz…. Todos fueron en su medida, fundamentales. Los quebrados fundían agua, otros cortaban carne, otros planificaban. Fuimos costureras de los sacos de dormir, fuimos madres, padres, enfermeros….”Coche Inciarte

“… En esa capacidad de adaptación, la mente jugó un papel definitivo, la mente del que se quiere salvar lo salva, pero la mente del que se entrega y dice “Yo de acá no salgo y me muero”, se muere en una semana”.Daniel Fernández

“… Ese trastorno psíquico que produce el shock del accidente, el estrés constante, la vigilia casi permanente, ese estado de miseria absoluta, nos hizo llegar a un nivel de comunicación entre nosotros que seguramente no lo puedo lograr en la vida civilizada. Estábamos tan solos en el universo que sólo nos teníamos a nosotros mismos. Ese vinculo no lo puedo obtener con un hermano, ni con un hijo, porque se trata de un lazo diferente”.Adolfo Strauch

“… Con estas lecciones de humildad aprendidas en los Andes, resulta difícil asimilar cuando a uno le hablan de hazaña y heroísmo. ¿Quiénes son los héroes? Yo me pregunto, ¿Qué héroes? ¿De que me hablan? Esta fue una historia de desgraciados, y en ese marco no había espacio para héroes ni lucimiento. Este concepto pertenece a la sociedad convencional, que después es recreado artificialmente en las películas y los libros. Arriba no había películas. A nadie la pasaba por la cabeza hablar de titanes y superhombres”.Moncho Sabella

“… ¿Por qué sobreviví, tullido en un lugar imposible? ¿Para qué ocurrió aquello en la forma en que sucedió? Hoy, vivo intentando dar respuesta a esas dos interrogantes que me acompañaron y me acompañarán por el resto de mi vida. Lo más curioso de todo es que la respuesta, la definitiva, siempre está un poco más allá. Cuando creo que estoy por alcanzarla … se me aleja”.Álvaro Mangino

“… Cuando a alguien lo reprendíamos, a veces lo ignorábamos, lo que era muy doloroso, porque te estaban diciendo que tu no existes mañana, y te lo estoy demostrando porque paso a tu lado y no te levanto, no te ayudo, quieres agua y no te ofrezco y, en la soledad, no había un futuro. Era el peor de los castigos. Éramos tan vulnerables que agregar algo de soledad a la orfandad absoluta en que estábamos era difícil de tolerar. Si te borraba en el presente, te estaba sacando de la ilusión compartida. Y nosotros no teníamos ilusiones aislados”.Gustavo Zerbino

“… Para mantener la fe en todo momento, a pesar de los revolcones que nos daban, teníamos que ser alquimistas. Transformar la tragedia en milagro, la depresión en esperanza. Si fuera a definir lo que nos produjo la montaña, no tengo dudas que nos transformo en alquimistas. El ejemplo más perfecto ocurrió el día que suspendieron la búsqueda. El que nos trajo la noticia transformo una mala noticia en una buena nueva, y nosotros lo interpretamos como tal”.Javier Methol

“… Nosotros descubrimos en la montaña que el ser humano puede ponerle límites al sufrimiento y, probablemente –esto es una perspectiva personal-, puede ponerle límites a la felicidad. Uno tiene capacidades relativas de sufrir y de ser feliz.
Probablemente si uno no hubiera sufrido todo lo que deberíamos haber sufrido, nos hubiésemos quebrado emocionalmente y no hubiésemos salido jamás”.
Pedro Algorta

“… Como todo estaba trastocado, se disloco también mi frágil personalidad. Ese jovencito consentido, de dieciocho años, hijo de padres divorciados, con clara tendencia a las adicciones, hipocondríaco crónico, quedó, literalmente, patas arriba.
¿Era verosímil, entonces, pensar que ese muchacho lleno de dudas y temores pudiera sobrevivir? Sin embargo, en los andes nunca me preocuparon las enfermedades. Ni las dudas. Ni la muerte. Todos los asuntos que me desvelaban en el llano desaparecieron en la altura. Tuve instantes de depresión, en muchos momentos, llegue a pensar que nunca saldríamos del cajón de nieve donde estábamos, pero continúe pujando, porque siempre mantuve viva alguna expectativa”.
Carlitos Páez

“… Los ingleses lo llaman “WALK THE TALK”. O el otro lema: “Si no vives como piensas, acabaras pensando como vives”. Posiblemente haya muchos de los dieciséis que sean muchísimo mejores que yo como persona. Pero WALK THE TALK, haz lo que dices, es una buena pauta de conducta para gente que padeció lo que nosotros padecimos”.Roy Harley

“… Cuando se racionaliza lo que sucedió, y se habla de los roles que cada uno desempeño, se pueden hacer muchas elucubraciones. Entonces vienen algunos amigos de la montaña y me dicen, con mucha ternura, que yo, con mi indiferencia con respecto a mi persona, los ayude a ellos, porque los motivaba a cuidarse, como quien cuida a un hermano menor más vulnerable, les daba motivos para resistir porque también debían cuidarme a mí. Pero yo creo que son racionalizaciones de los amigos, que las hacen porque me quieren”.Bobby François

“… Desde el momento del accidente me impuse un objetivo que viene del rugby: si iba a morir, si íbamos a morir, lo haríamos actuando, dando más de lo que podíamos, en mi caso caminando, más tarde formando parte del equipo expedicionario. Es decir, iba a morir de pie, no postrado sobre unas chapas contraídas del avión…. Todo parecía formar parte de un orden preestablecido, como el “Amigos por la eternidad”.Tintín Vizintín

“… Para poder sobrevivir, para poder adaptarnos a ese ciclo diferente de la historia del hombre, deberíamos convertir nuestras emociones en rocas, no solo porque convivíamos con la muerte y el desamparo, sino porque debíamos crear un mundo con los pocos elementos que estaban en nuestro entorno, como hacia el hombre del paleolítico, con la única diferencia que teníamos un bagaje previo que el hombre prehistórico no tenia; el creaba de la nada, nosotros creábamos sobre la base de lo que recordábamos, que si bien nos ayuda en la práctica, nos destroza en lo anímico”.Pancho Delgado

“… Para superar ese sufrimiento que me hubiese llevado a la locura, en medio de aquellos cuadros de delirio que sufría desde los primeros días tras el accidente, me volqué en mi interior en busca de una explicación, o de una salida, habida cuenta que en el exterior no solo nadie podía ayudarme, sino que todo me abrumaba cada vez más. Ese fue mi método para esquivar la demencia, la expansión de la conciencia facilitada por la soledad y el sufrimiento”.Eduardo Strauch

“… Nunca fuimos mejores personas en los Andes. Allí no había interferencia externa, no había dinero, no había intolerancia, no había hipocresía de relaciones por ventajas, o por interés, porque nadie tenía nada material para ofrecer, no había doble discursos, no había posibilidad de ascensos en el trabajo porque no había empleo, no había nada. Todos éramos absolutamente honestos, porque íbamos a morirnos. Cuando el médico te anuncia que te queda una semana de vida, ¿Se te ocurre mentirles a tus amigos?Nando Parrado

La sociedad de la nieve, sin lugar a dudas, es un libro duro de leer, pero del que recomiendo su lectura. Aunque los dieciséis supervivientes tuvieron el accidente muy jóvenes y sin experiencia, hoy (2.008), cuando analizan su periplo de sesenta y dos días en los Andes, se pueden sacar muchas conclusiones.

Se vieron obligados a crear una nueva sociedad, con unas nuevas reglas, como decía Pancho Delgado, es volver a la prehistoria; si, pero, con el Now Know de estos años. Por tanto si tenemos que reinventar nuestra organización y las personas que trabajamos en ella, quizás es un buen momento para hacerlo.

Pero todo ello, sin perder de vista, la pregunta ¿Qué empresa queremos ser /tener, después de nuestro periplo particular por “los Andes”?


LA SOCIEDAD DE LA NIEVE
El relato definitivo de una vivencia extrema donde el liderazgo y la capacidad de superación fueron decisivos
Pablo Vierci
DEBATE

“Vivir no alcanza;
Soñar es lo que importa”
Daniel Fernández


Recibid un cordial saludo

2 comentarios:

José Luis dijo...

Habrá que leerlo
En estos días se hablará mucho de la resiliencia
Un saludo

Javier Pérez Caro dijo...

GRACIAS José Luis

Recibe un cordial Saludo