lunes, 29 de abril de 2024

Por qué tomarse la empresa con filosofía

Estimad@s amig@s

Sinopsis

Existe la creencia generalizada de que una empresa, casi por definición, debe saber adónde se dirige, cuál es su propósito y su misión. Como es lógico, lo mismo esperamos de las personas que ocupan puestos de responsabilidad: que sean determinadas, infalibles, que tomen decisiones sin vacilar.

Pero la realidad de cada día nos dice que la dirección de un negocio es, realmente, un jardín inagotable de preguntas, de dudas, de situaciones imprevisibles que nos vemos obligados a controlar. La empresa es el territorio natural del homo quaerens, es decir, el ser humano que se hace preguntas. Solo hay otro territorio que se le parece: el de la filosofía.

Fátima Álvarez nos conduce a lo largo de 2.500 años de filosofía para ofrecernos las respuestas (o, al menos, las herramientas) que las grandes mentes de la historia hallaron antes que nosotros, y lo hace de modo que podamos adaptarlas a los problemas de una empresa: la felicidad de nuestros equipos, la salud mental, la fuga del talento, el propósito. Muchas veces, todos estos conceptos se nos presentan enmarañados y se nos hace difícil discernir entre tanto ruido y premura.

Estas páginas te invitan a contemplar el escenario actual con la mirada de la filosofía, a tirar del hilo de las ideas para desenmarañar el ovillo y a comprender mejor dónde estamos y hacia dónde vamos.

 

«La actividad más honorable es servir al público y

ser útil para la mayor cantidad de personas posible»[i]

 

Introducción

¿Por qué? Es una pregunta presente en el pensamiento de todos los niños y en el interior de cada adulto: “¿Por qué (me) ha sucedido esto?”, “¿Por qué tengo que hacer lo otro?”, “¿Por qué lo consigo?” o “¿Por qué se me resiste?”, “¿Por qué al otro?” y “¿Por qué no a mí?”, o “¿Por qué si?”. Somos la única especie que hace preguntas. Inevitablemente, intentamos encontrar sentido.

 

(…) por qué tomarse la empresa con filosofía. No la vida. ¿Acaso si hablamos de la empresa, nos salimos de la vida? ¿Acaso las empresas no forjan también su propio carácter, su forma de ser, su manera de tomar decisiones? ¿Acaso no es la empresa una realidad humana, un quehacer entre personas? ¿Pueden sus acciones, entonces, librarse de la búsqueda de sentido?

Tomarse la empresa con filosofía es aportar una mirada filosófica sobre la empresa y presentar cómo estos tiempos, que corren tan aceleradamente, pueden nutrirse y crear puentes con esta disciplina (…)

El papel de la filosofía es aportar un compendio de herramientas necesarias para aprender a pensar con nosotros mismos e intentar comprender lo que sucede en nuestro contexto y lo que nos preocupa. Es ayudar a hacer buenas preguntas, plantear correctamente los problemas y dar argumentos a las decisiones que hay que tomar (…)

 

¿Es este un libro de filosofía de la empresa? ¿O de filosofía del buen liderazgo?

Es un libro sobre la empresa y el conjunto de personas que lo conforman.

 

Ø  ¿Para qué? Para qué hacemos lo que hacemos y qué legado dejamos.

Ø  ¿Por qué? La necesidad del pensamiento crítico para deliberar con fundamento.

Ø  ¿Cómo? La respuesta ética a los desafíos de la actualidad.

Ø  ¿A quién? La búsqueda de puntos de encuentro a partir de lo importante.


Ø  ¿Hacía dónde? Para mirar hacía un horizonte colmado de sentido.

 

«No hay mayor tirano que

un enano con un látigo en la mano»[ii]

 

¿Por qué debemos leer filosofía?

¿Por qué debemos tener presente la filosofía en nuestro día a día profesional /personal?

(…) Era una práctica habitual que los senadores romanos contaran con un filósofo particular que diera fe de su virtud y los ayudara a sobrellevar los momentos de frustración (…)

Ø  ¿En la actualidad hemos sustituido la figura del filósofo por la de un coach?

o   ¿Ha sido una decisión acertada?

§  ¿Por qué?


¿Debe tener nuestra compañía en su órgano de administración un profesional que se tome la empresa con filosofía?

Ø  ¿Por qué?


¿Cuán tirano es la frustración con nosotros?

Ø  ¿Por qué?

¿Somos capaces de manejarla?

Ø  ¿Cómo nos puede ayudar la filosofía en un proceso de mejora continua?

 

(…) “El verdadero filósofo debe ir siempre a contracorriente, como el salmón en un rio. Su tarea es decir lo que el poder no quiere oír[iii] y, sobre todo, tiene que ser un hereje[iv] (…) …

 

Fátima Álvarez nos propone en este breve ensayo reflexionar con mayúsculas, tomando distancia, teniendo presente siempre a la empresa, el bien común, el pensamiento crítico, la búsqueda de sentido en nuestras acciones. Las cosas buenas en tarros pequeños, los ensayos breves que muevan conciencias…

 

«Habla

para que yo pueda conocerte»[v]

 

¿Para qué hacemos lo que hacemos?

Algunas de las personas que se cruzan en nuestra vida simplemente vienen y se van. Otras vienen y, aunque también se van, en el fondo se quedan con nosotros porque nos dejan huella (…)

 

Cuando llevamos a cabo acciones en la empresa, debemos hacernos la pregunta de “para qué”. ¿Para qué hacemos lo que hacemos? (…)

 

Cuando actuamos, tenemos que poder dar cuenta de nuestras acciones ante los demás e, inevitablemente, ante nosotros mismos (…) siempre habrá interrogantes éticos que nos demandarán una respuesta razonada y sentida internamente somo válida. Solo así podremos serenar nuestra conciencia. Solo así podremos dormir tranquilos.

Esa conciencia puede ser más o menos exigente según nuestro grado de desarrollo moral, tal como hemos visto: según nos mueva el egoísmo, el conformismo o seamos capaces de pensar en términos de u bien común (…) deberíamos incorporar también en nuestro carácter la pregunta, el cuestionamiento.

El problema del bien común es que, por un lado, no siempre es tan común, porque puede construirse en saldo desde el pensamiento único[vi]: si todos piensan lo mismo, es muchos no piensan (…)

 

¿Te has parado a pensar alguna vez cuál es el bien interno, aquello que da sentido, que legitima la actividad empresarial?

 

(…) “En realidad no importa que no esperemos nada de la vida , sino si la vida espera algo de nosotros”[vii]. ¿Qué espera la vida de ti? ¿Cuál es tu contribución? (…) ¿Y cuál es la contribución de tu empresa al mundo? (…) ¿Cuál es su legado? (…)

 

(…) ¿Eres o pareces? “Conócete a ti mismo”[viii] (…) mírate para poder mirar. Mira dentro para poder ir hacía fuera. Sal fuera para mirar dentro (…)

 

(…) ¿Es importante que pensemos? Tú verás si quieres ser el protagonista de tu vida o un actor secundario.

¿Es importante que en una empresa se fomente el pensamiento crítico? ¿Se convertirán los equipos en un avispero? ¿Se resentirá el liderazgo? ¿Qué sentido tiene? ¿Es preciso que todo el mundo se manifieste? ¿Adonde vamos? ¿Nos echamos las manos a la cabeza? ¿O la ponemos a pensar?

 

¿Dudas? ¿De qué dudas? (…)

 

La duda hace que te cuestiones (…) te mueve a reflexionar (…)

 

Ni crédulo ni indeciso. Duda con sentido común (…) “Siempre que enseñes, enseña a la vez a dudar de lo que enseñas”[ix] (…)

 

¿Cómo ser comunidad sin ser rebaño?

 

(…) “A ver cómo te expresas y te diré cómo piensas” (…) “A ver cómo piensas y te diré cómo decides” (…) un pensamiento bien construido favorece la buena toma de decisiones.

 

(…) el pensamiento crítico es un proceso activo que se trabaja como hábito y que requiere de un esfuerzo persistente para examinar a cualquier creencia (…) o cualquier forma de conocimiento a la luz de las evidencias que la apoyan y las conclusiones a las que se pueden llegar (…)

 

(…) ni somos autores exclusivos de nuestros éxitos ni tampoco de nuestros fracasos. ¿Sabes por qué? Porque convivimos, y nos influimos los unos a los otros.

 

¿A quién le importa lo que importa?

 

Espejito, espejito

Si te preguntarán cómo eres, ¿Qué dirías? (…)

 

«La información puede transmitirse,

 se pueden inculcar las ideas,

 los sentimientos pueden compartirse,

pero los significados hay que descubrirlos»[x]

 

Corolario,

¿Hacía donde corremos?

Si el liderazgo humanista se centra en las personas, ¿por qué las personas no ponemos en el centro de la vida? (…)

 

«Soy un hombre,

nada humano me es ajeno»[xi]

 

Por qué tomarse la empresa con filosofía

Fátima Álvarez

Plataforma editorial


Link de interés

El príncipe

Discursos sobre la primera década de Tito Livio

La tiranía del mérito

Ética en dirección de empresas: Calidad humana para una buena gestión

Valor y valores: Ética para directivos

Tiempo de cuidados

Filosofía para directivos: Filosofía para mejorar el liderazgo y la gestión empresarial

• Liderazgo ético: La sabiduría de decidir bien

• Entrevista a Aristóteles: Filosofía para líderes y emprendedores

• Ética a Nicómaco

• Elogio a la duda: Todo lo que podría ser de otra manera

• Aprende a pensar como un gurú: Las 10 fuerzas del pensamiento crítico

• El hombre en busca de sentido

Crecer haciendo crecer: El secreto de las empresas consistentes

Pensadoras y visionarias: Las ideas de diez filosofas aplicadas a la gestión

• La República

El dilema de la IA

• Ética para máquinas

 

«¡No estamos locos!»

 

ABRAZOTES


[ii] Ídem

[iii] Sócrates fue conocido como “el tábano de Atenas” por su capacidad de incomodar.

[v] Sócrates

[vi] (…) si hay un consenso positivo, empiezo a sospechar. Traigo a una Casandra de fuera, un consultor externo, un abogado o un experto técnico cuyo propósito sea cuestionar nuestra forma de pensar.

Ø  Los retos son nuestro negocio: Cómo adaptarse, reinventarse y triunfar en un siglo de desafíos

[vii] Viktor Frankl

[viii] Dictum inscrito en el templo del dios Apolo, en el oráculo de Delfos

[ix] Ortega y Gasset

[x] Matthew Lipman

[xi] Proverbio latino consignado por el cartagineses Terencio 

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