Estimad@s amig@s
Sinopsis
En poco más de tres décadas
el mundo en el que vivimos ha cambiado de manera radical, pasando del final de
la Guerra Fría a una guerra caliente entre dos antiguas repúblicas soviéticas:
Rusia y Ucrania.
¿Cómo hemos llegado hasta
aquí? ¿Qué acontecimientos históricos nos han conducido a la guerra en Ucrania?
Para contestar a estas preguntas centrales, Javier Solana repasa los sucesos
históricos más relevantes desde la caída del Muro de Berlín en 1989 hasta la
invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022. Y lo hace desde la perspectiva que
le otorgan la distancia del tiempo y el privilegio de haber sido un observador
directo, cuando no partícipe, de estos hechos.
Testigo de un tiempo
incierto no se limita a ofrecer una descripción de eventos pasados, sino que
aporta también las reflexiones personales del autor sobre algunas cuestiones
cruciales para el futuro internacional: ¿Cómo abordar las relaciones entre
Occidente —en especial, Europa— y Rusia? ¿Cómo evitar una confrontación entre
China y Estados Unidos? ¿Qué papel debe desempeñar Europa? ¿A qué
desafíos se enfrenta la relación transatlántica y cómo gestionarlos? ¿Qué
responsabilidades tiene el Norte hacia el denominado Sur Global?
Una obra
fundamental para comprender los acontecimientos decisivos de la historia
reciente vistos por un protagonista de excepción.
«Esconde tu fuerza,
espera tu momento»[i]
Breve nota del autor
Son tiempos difíciles. No
repetir errores y subrayar las mejores decisiones políticas que se han tomado
en las últimas décadas es un deber de todos. Si contribuyo a ello, me daría por
satisfecho.
«Qué difícil es
gobernar una ciudad cuyas mayores glorias
están ligadas a un
país que no es el nuestro»[ii]
Somos testigos
de un tiempo incierto, pero no todos sabemos interpretarlo. Javier Solana va desgranando de manera didáctica en este ensayo, desde la caída del muro de Berlín a la invasión de
Ucrania, reuniones, conflictos, guerras, y
cambios en el tablero internacional.
La geopolítica y la
geoestrategia eran áreas hasta hace pocos años que no se estudiaban como tal en
las escuelas de negocio, y en las grandes corporaciones se subcontrataban
estudios a las consultoras de cabecera. No existían como tal los departamentos
de riesgos, la vigilancia
competitiva, o la monitorización a tiempo real.
Aprovechemos testimonios
como el de Javier Solana
tanto para aprender como para prevenir. Anticiparnos, prever posibles escenarios
de crisis nos podrán ser de ayuda, visualizar el terreno, identificar amigos y
enemigos, y sobre todo pensar en el futuro son claves que ningún directivo, consejero, propietario, etc., debería
de obviar.
«No podemos
permitirnos dejar a China para siempre fuera
de la familia de
naciones,
alimentando sus fantasías, acariciando sus
odios
y amenazando a sus vecinos»[iii]
(…) Gorbachov es
hoy recordado por occidente como un gran líder reformista, que puso sus grandes
cualidades humanas al servicio de su país y de la paz en el mundo. Fue el líder
de una revolución que no pudo llevarse hasta el final, principalmente, porque
la Unión Soviética era irreformable.
(…) la caída de la Unión
Soviética proporcionó la posibilidad de resolver las diferencias ideológicas
del pasado, pero tambien la necesidad de gestionar conjuntamente los
principales riesgos y desafíos de la seguridad internacional (…) una de las
consecuencias más importantes de la disolución de la Unión Soviética fue el
surgimiento de una nueva potencia nuclear: Ucrania (…) Cuando Ucrania se
independizo, el arsenal nuclear que albergaba la recién nacida república la
situaba como la tercera potencia nuclear en el mundo (…)
(…) IFOR[iv] fue
un recordatorio diario de que Rusia y la OTAN tenían intereses comunes cuando
se trataba de la seguridad europea y de que ambas podían dar comienzo a una
nueva etapa de cooperación entre ellas.
(...) la política de
seguridad nacional de Rusia ha estado definida por la búsqueda de “profundidad
territorial”, lo que, en términos prácticos, implica que, para sentirse segura,
Rusia no puede tener fronteras naturales o directas con Occidente.
Ucrania no solo contribuyó
al poderío soviético con un gran complejo militar industrial (…) sino que
destacó por ser la sede de instalaciones militares estratégicas, como la base
naval de Sebastopol (…)
(…) el 80% de la producción
de la empresa pasó a ser no-miliar, pero su capital humano y técnico seguía
estando infrautilizado.
(…) a veces las
descripciones exhaustivas de los cargos institucionales dificultan más de lo
que ayudan a desempeñarlos (…)
Cuando la política exterior de
un país de deja arrastrar por corrientes emotivas, la diplomacia suele quedar
relegada a un segundo plano (…)
La guerra de Irak dividió a
la comunidad internacional, dividió a la Alianza Atlántica, y dividió a los
europeos. Las diferencias entre sus principales Estados miembros dejaron a la
Unión Europea en un estado de parálisis institucional (…)
(…) la falta de una
estrategia de seguridad común hacía difícil la unidad de acción de los europeos
en el mundo (…) la Unión Europea tenía que pasar de ser un actor comercial y
económico de primer orden a serlo tambien en el ámbito de la política exterior
y de la seguridad.
Putin siempre ha mantenido
un relato selectivo y distorsionado de la historia ucraniana. No le importa
que, desde el nacimiento de la Unión Soviética, Ucrania hubiese sido una
república autónoma con el mismo estatus formal que Rusia, aunque integrada en
la URSS (…)
A diferencia de Estados
Unidos, Europa comparte un mismo continente con Rusia (…) la relación entre
Europa y Rusia es un asunto que requiere de un constante trabajo en diversas
áreas de interés mutuo, como la seguridad energética, la migración, el comercio
y el crimen organizado (…)
(…) Putin no podía ser
presidente ad eternun, pero poco a poco estaba convirtiendo en el líder hegemónico
de un sistema político cada vez más desprovisto de mecanismos para limitar su
poder (…)
(…) gustaba de jugar la
carta de la política exterior para apuntalar la popularidad domestica (…)
(…) los vínculos entre
deporte, nacionalismo y prestigio internacional quedaron patentes en los Juegos
Olímpicos de Pekín (…)
(…) utilizar la fuerza y el
recurso de la guerra como herramientas fundamentales de su política exterior (…)
(…) empantanamiento de la
estructura de poder iraní en la toma de decisiones. La República Islámica es un
régimen extraordinariamente complejo que vive mucho más ensimismado de lo que
generalmente se cree (…)
La complejidad institucional
de Teherán ha sido un factor determinante en las dos décadas largas de negociación
nuclear (…)
Aunque las instituciones son
muy importantes, a veces las personas son decisivas (…)
La inesperada elección de Trump
en 2016 provocó un cambio radical en muchas áreas de la política exterior de
Estados Unidos y daño gravemente las estructuras de la gobernanza global (…)
propinó un duro revés ―y continua haciéndolo― a la credibilidad de Estados
Unidos (…)
(…) los mal llamados “hombre
fuertes” no suelen entender ni de ideales ni de sensibilidades sociales: su
prioridad es asegurar su propia supervivencia política y cultivar relaciones personales
con líderes de talante similar (…)
(…) durante su mandato,
Trump se rodeó progresivamente de una camarilla de yes-men y aparto a
los pocos que se oponían a sus ideas más descabelladas (…)
La “Trampa de Tucídides”[v] se
refiere al elevado riesgo de confrontación que existe cuando una potencia
emergente amenaza con desbancar a una potencia establecida ―es el mayor escollo
geopolítico al que se enfrentará la humanidad en las décadas venideras (…)
En la región del Indo-Pacífico
es donde existen las mayores oportunidades económicas, así como los mayores
riesgos de conflicto (…) Taiwán es uno de los puntos de fricción que pueden ser
determinantes en los próximos años. Su importancia va mucho más allá de sus vínculos
históricos con China, ya que está pequeña isla es reconocida por su habilidad
para producir los mejores semiconductores[vi] (…)
serán fundamentales en la pugna entre Estados Unidos y China por afirmarse como
la primera potencia tecnología (…)
Xi tiene
ambiciones globales para China y no va a querer comportarse como un mero espectador
de la coyuntura internacional. China quiere participar en la creación de las
normas globales que van a regir el orden del siglo XXI (…)
(…) un país respetado en la
comunidad internacional lo es por su desarrollo económico, sus capacidades tecnológicas
o el valor de su capital humano (…)
El mundo se encuentra ante
una disyuntiva histórica: entre buscar un nuevo sistema de cooperación
internacional o un escenario en el que la escalada entre potencias lleve a un
conflicto mundial. El orden que nos espera para las próximas décadas será más
complejo y multipolar, y es probable que ninguna potencia domine por si sola (…)
se necesitarán mutuamente para resolver problemas, tanto aquellos que sean de ámbito
doméstico, como los globales y compartidos (…)
Desarrollar capacidades no
tiene otro propósito que reducir dependencias. Europa debe evitar depender
excesivamente de sus competidores, sin que ello implique llegar al decoupling[vii] o
la ruptura de lazos económicos (…)
«… la acción ética es
una lágrima derramada sobre la necesidad.
El dolor por una acción necesaria en tanto que
acción,
pero alejada todavía del ideal»[viii]
De
la caída del Muro a la invasión de Ucrania
Link de interés
• La
humanidad amenazada: Gobernar los riesgos globales
• China
• EsadeGeo - Centro de
Economía Global y Geopolítica
«A veces
no queda más remedio
que enfrentase a la guerra»[ix]
ABRAZOTES
[i] Deng Xiaoping
[ii] Alcalde de Sebastopol
[iii] Richard M. Nixon
[iv] Implementation Force
[v] Teoría del profesor de Harvard Graham
T. Allison
[vi] La guerra de los chips
[vii] Desacople, desajuste, desconexión o
desacoplamiento
[viii] Hegel
[ix] Javier Solana
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