viernes, 9 de junio de 2023

La enseñanza de la dirección y el método del caso

Estimad@s amig@s

Sinopsis

En relación con su uso para la enseñanza de la dirección, Carlos Llano nos muestra en está obra que el método del caso es especialmente más ambicioso que la enseñanza tradicional. La pretensión del método del caso en la enseñanza de la dirección de empresas es llevar al aula genuinas situaciones de negocios, para ser analizadas con miras a identificar y evaluar causes alternativos de acción para quién toma las decisiones.

El método del caso, según se nos presenta en está obra, es precisamente un ejercicio de observación y de juicio que convierte la experiencia en un factor educativo. El contacto con los puntos de vista de los demás, así como el contraste de criterios o juicios de valor propios con los ajenos, permiten practicar una valiosa gimnasia que recopila la experiencia y ensancha las propias capacidades de acción.

 

No hay empresas de calidad,

 sino empresas donde los que en ella trabajan

 se esfuerzan en hacer las cosas con calidad[i]

 

Prólogo[ii]

(…) aprender es algo que yace dentro de cada persona; el ser humano es un ser dispuesto para el aprendizaje como un fin (…) el método del caso resulta así no como un método de enseñanza, sino de aprendizaje; es aprendizaje dirigido (…) poner especial atención al proceso de interacción que se establece con los alumnos en el aula (…) no es posible en semejante pedagogía adoptar una postura de observador pasivo.

(…) la pedagogía del método del caso precisamente busca conseguir que quien aprende con ella logre sistematizar, en la medida en que ello es posible, la información requerida para identificar, formular y resolver los problemas a los que esa «escuela de la vida» nos enfrenta de continuo.

(…) para adquirir experiencia es preciso ir más allá de la mera acumulación de horas de trabajo (…) es fundamental que el interesado ponga en ejercicio dos actitudes y la disposición para fortalecerlas y acrecentarlas: apertura de mente y firmeza de criterio.

La apertura de mente (…) se deriva de la disposición para aprender, en la medida en que se tenga también capacidad para observar la actuación y la forma de pensar de los demás. La firmeza de criterio (…) capacidad de emitir juicios de valor equilibrados (…) permite al individuo distinguir entre lo que sirve y lo que no, entre lo urgente y lo importante, entre lo esencial y lo accesorio, entre lo que interesa a sus propósitos y lo que es ajeno a ellos (…)

El método del caso (…) es un ejercicio de observación y de juicio que convierte la experiencia en un factor educativo (…)

(…) los objetivos educativos del método del caso han de centrarse en cualidades intelectuales (curiosidad, juicio, sabiduría) y personales (carácter, sensibilidad, integridad, capacidad de compromiso, responsabilidad)

(...) no sólo es posible aprender del error, sino que es preciso también hacerlo a partir del éxito (…)

(…) crear espacios de apertura y confianza en un aula, de formular las preguntas apropiadas, de manejar la incertidumbre, etc., son verdaderas lecciones sobre el modo de conseguir que el intercambio de puntos de vista sea una invaluable y excitante experiencia de aprendizaje (…)

 

Más vale proponerse la meta de la excelencia y fracasar

 que el de la mediocridad y tener éxito[iii]

 

¿Me puede ayudar el método del caso a crecer profesionalmente?

-     ¿Cómo?

-     ¿Por qué debo utilizarla?

-     ¿Para qué?

-     ¿Cuándo se debe de utilizar?

 

El método del caso es una metodología de impartir sesiones que nos puede gustar más o menos. Hay algunos que llevan años intentando enterrarla por diversos motivos (les parece anticuada, no la conocen /saben trabajar con ella, o simplemente prefieren trabajar con otras). Para que aporte valor tanto la persona que conduce la sesión como a los participantes deben preparar muy bien la sesión, haber trabajado la documentación individualmente, realizado una buena discusión previa en equipo, planteado posibles escenarios /planes de acción, no tener miedo a participar en el debate (un buena discusión del caso nos permite crecer). Tus opciones pueden ser tan validas como las de los demás, no olvidemos que en el método del caso no hay soluciones únicas, todas pueden ser iguales de validas o lo contrario.

 

Me gusta el método del caso y no solo para dar clases también para dar sesiones one to one con directivos, si conoces la metodología puedes exprimir el arte de preguntar, buscar escenarios, explorar otras vías que potencien el desarrollo de los partícipes.

 

Busca, compara y si encuentras una mejor opción de entregar valor al cliente utilízala.

 

Siempre se puede aprender de alguien

 que esté en plena acción de algo que domina[iv]

 

(…) la primera fuente de educación es la experiencia, no la enseñanza (…)

 

La experiencia como fenómeno educativo (…) requiere en el hombre que se educa (…) dos condiciones o actitudes imprescindibles, y la disposición de adquirirlas: a) apertura de mente y b) firmeza de criterio.

 

(…) el método del caso como otros métodos activos de enseñanza considera que aprender no es escuchar, sino descubrir. El maestro (…) ha de suscitar las circunstancias y condiciones para que el alumno descubra por sí mismo lo que ya sabe (…) la educación no consiste en escuchar sino en ejercitar un proceso constante de descubrimiento (…)

 

(…) si yo no intervengo el que no aprendo soy yo mismo (…)

 

(…) la objetividad del análisis nos obligará a distinguir entre hechos y opiniones. Se asume que los hechos pueden ser analizados con objetividad, en tanto que las opiniones tienen un carácter subjetivo (…)

 

(…) la uniformidad de opiniones es sospechosa: sospechosa de no haber hecho el esfuerzo requerido; sospechosa de no tomarse la molestia de “no estar de acuerdo”.

 

(…) preparar una sesión significa explorar las distintas vías o caminos hacia los que los participantes podrían dirigirse, y determinar el provecho pedagógico que pudieran obtener en cada una de esas posibilidades.

 

El método del caso no pretende que el alumno reciba, sino que descubra. La función didáctica consistirá en poner al alumno en la tesitura de descubrimiento: que encuentre por sí mismo lo que haría si se hallase en la situación del caso (…)

 

(…) el buen maestro será aquel que acierte a combinar los tres criterios (…) en un grado aceptable de compresibilidad, fundamentación e interés… o quien logre elegir un texto que maneje acertadamente ese triple criterio, pues es el texto, más que en el profesor, en donde la conexión lógica de las enseñanzas se pone claramente en evidencia.

 

(…) la enseñanza comienza con una pregunta (…) pregunta-procedimiento-respuesta (…)

 

El método del caso pretende, más que nada, desarrollar la capacidad de preguntar, y se equivoca quien considera el caso como un problema a resolver (…) lo más rico de esa metodología, que busca, preferentemente, no la resolución de un problema, sino la definición del problema mismo ante una situación real dada (…)

 

La prudencia es la capacidad que tengo para emitir un juicio acertado sobre lo que je de hacer aquí y ahora (…) prudencia es la razón directiva de nuestras acciones particulares presentes; la razón en cuanto que dirige el obrar individual (…)

 

(…) no es prudente quien conoce todo lo que se ha escrito sobre la prudencia, sino quien acierta en los juicios que dirigen su acción.

 

(…) el directivo ha de ser inteligente y rápido en sus decisiones, y mal podrá prepararse para ello en un ambiente de “serena” lentitud y sosiego (…)

(…) un director de casos no ha de perder de vista el adagio bíblico según el cual omni negotio tempus est et oportunitas: para todo asunto hay un tiempo y una oportunidad especificas (…)

(…) la agilidad en la discusión de un caso, la contestación a flor de piel, la pregunta desprevenida, la cuestión critica presentada a bocajarro, con exigencia de respuesta inmediata, no son procedimientos caprichosos y accidentales para quien dirige un caso: es el modo de suscitar esa rapidez que toda sagacidad entraña.

 

No se necesita saber mucho,

 sino saberlo hacer realidad[v]

 

La enseñanza de la dirección y el método del caso

Carlos Llano Cifuentes

IPADE

 

Link de interés

Cátedra Carlos Llano Cifuentes

Los orígenes del IESE

 

La rutina no mejora:

el rutinario es el antípoda del experto[vi]

 

ABRAZOTES


[i] Carlos Llano Cifuentes

[ii] Sergio Raimond-kedilhac Navarro

[iii] Carlos Llano Cifuentes

[iv] Peter F. Drucker

[v] Carlos Llano Cifuentes

[vi] Carlos Llano Cifuentes

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